Masaje Historia

Sumario
1 Historia
2 Características
3 Masajes energéticos con Elementos Naturales
4 Técnicas de automasaje
4.1 Tratamiento
4.2 Técnicas
4.3 Efectos
5 Resultados
6 Fuentes
Historia
El masaje es una de las artes curativas más antiguas, todas las civilizaciones antiguas y modernas recomiendan esta técnica para mejorar la calidad de vida de las personas. En China, Grecia, Roma, Persia, Egipto, India, Japón y en muchas civilizaciones menos poderosas, se utilizaba el masaje como procedimiento curativo. Durante la edad media se dejó de utilizar porque se creía (desde el cristianismo) que el cuerpo no era importante, y en realidad se lo creía como vehículo de las tentaciones y el pecado. Pero luego de ese oscurantismo, y retraso en la evolución humana, fue recuperando su prestigio al mismo tiempo que la medicina comenzaba a adquirirlo, lo que implicaba un gran reconocimiento de la importancia del cuerpo. Y a medida que se fue deshaciendo esa dualidad mente-cuerpo, para pasar a integrar al Hombre en una unidad, el masaje también recupera su posición. En la actualidad se puede encontrar diferentes métodos, uno de ellos es el Masaje Energético, que promueve el aumento de los niveles energéticos de la persona sometida a él. Se puede decir que la técnica de masaje libera las tensiones de forma tal que disminuye los niveles de estrés. Es muy importante para la vida moderna, porque se vive rodeado de situaciones que comprometen la tranquilidad personal y familiar. El masaje energético brinda la posibilidad de trabajar con los distintos niveles de energía de una persona. El cuerpo material y los cuerpos sutiles. Se trabaja con los complejos sistemas corporales: muscular, nervioso y linfático, produciendo la liberación de toxinas que contaminan el cuerpo y que además colaboran a cronificar los estados de tensión. El masaje promueve la circulación de la sangre y del líquido linfático y la mayoría de los estados patológicos mejorará si se estimula la circulación de estos dos fluidos vitales.

Características
Para aplicar una terapia adecuada, es imprescindible hacer un buen diagnóstico. El diagnóstico debe ser siempre lo más preciso posible. Hay diferentes formas para diagnosticar. Naturalmente en primer lugar hay que escuchar y tener en cuenta los síntomas que describe y presenta el paciente. El tacto de la piel y de los meridianos nos da información de su estado energético. También se hace un diagnóstico muy fiable a través de la oreja. En la oreja se encuentran reflejados todo el cuerpo y los meridianos. Haciendo un test en estas zonas de la oreja se puede averiguar el estado energético actual del paciente y aplicar el tratamiento adecuado. El masaje energético se aplica haciendo una presión de intensidad variable apoyada y deslizada con el pulpejo del pulgar -maestro de la energía-. Busca la activación de distintos resonadores de energía -puntos de acupuntura- (su acción es equivalente a la de una aguja de puntura) y tiene un efecto específico dependiendo de la intención del terapeuta. Mediante las manipulaciones, el masaje energético actúa directamente sobre las zonas afectadas, estimulando la circulación sanguínea, y rectificando la estructura de huesos y tejidos blandos. La relación entre resonadores, canales energéticos y estructuras orgánicas, produce un efecto en todo el organismo: influye en las funciones de los órganos y entrañas, del Sistema Nervioso Central -médula espinal y corteza cerebral- del Sistema Nervioso Autónomo -Simpático y Parasimpático-, del Sistema Metabólico –glándulas-; y actúa en la esfera mental y emocional del paciente. El programa de habilitación integral desarrollado en crisálida, exige al niño un ritmo alto de trabajo. Para que pueda procesar adecuadamente todos los estímulos e información que recibe, se usa el Masaje Energético buscando activar sus sistemas neurológico, respiratorio, inmunológico, circulatorio, gastrointestinal y endocrino; y ayudarle a relajarse y liberar tensiones. Es un complemento eficaz en la aplicación de otro tipo de terapias. El Masaje Energético se puede acompañar de aceites esenciales (aromaterapia) que faciliten la cualidad del «toque» y estén indicados para potenciar la eficacia del tratamiento aplicado. Aparte de todos los beneficios físicos, el Masaje Energético propone un encuentro, en un espacio y un tiempo de gran calidad, que facilita la conciencia corporal, las relaciones de confianza y seguridad, e intensifica la comunicación entre el niño y el terapeuta permitiendo escuchar, adaptarse y estar más en contacto con sus necesidades. El Masaje facilita los vínculos afectivos porqué incluye los elementos principales para establecerlos: mirada, contacto piel a piel, sonrisas, sonidos, abrazos, olor, emisiones de voz y respuestas.

Masajes energéticos con Elementos Naturales
Los masajes energéticos son muy beneficiosos para la persona que será tratada con ellos. En una sesión de masajes energéticos son mezcladas varias técnicas que transfieren nuevas energías para poder continuar con la vida. Para aportar mayor energía se utilizan elementos propios de la tierra como piedras o gemas, flores y plantas. Cada ingrediente natural que se agregue al masaje es especial para cada persona. Las plantas y flores son utilizadas como infusiones y aceites con los que se frotan las zonas doloridas de los pacientes. También se utilizan las hojas y los pétalos.

Piedras o gemas: Estos masajes son totalmente revitalizantes. Además beneficia tanto como al masajista como al que recibe el masaje. Se utilizan piedras preciosas, piedras del mar, gemas, etc. Los masajes se realizar con piedras calientes y frías, según se necesite. Estos masajes son descontracturante y tonificadores.
Flores: Se utilizan flores como manzanillas, rosas, y lavanda, entre otras. Son masajes antiestrés y relajante. Ayudan el sistema circulatorio y nervioso. *Plantas: Estos masajes se realizan como aloe vera, pino y menta, regeneran la energía y además ayudan a humectar la piel y mantenerla viva.
Técnicas de automasaje
Las personas cuando tratan de aliviar el dolor de su espalda, no saben que están empleando técnicas del automasaje. Por lo general, las personas también ignoran que hacer masajes cuando se sienten en buen estado de salud ayuda a prevenir enfermedades. Si se encuentra enfermo, un buen masaje puede iniciar y acelerar el proceso de curación. El mayor beneficio de este tratamiento es que puede ser combinado con otras técnicas para acelerar el proceso y aumentar su efectividad. Si se hace de forma lenta y suave, el automasaje relaja el cuerpo. Si se hace con mayor fuerza e intensidad, combate la fatiga y revitaliza el cuerpo.

Tratamiento
Cada masaje debe comenzar con golpes suaves con la palma abierta en toda la superficie de la piel a la que piensa dedicarse. Luego, con una o dos manos comience a masajear suavemente. Los masajes deben durar alrededor de veinte minutos.

Técnicas
Circular: realizar los masajes en forma circular con las manos o los dedos estimula la circulación y relaja los músculos.
Aceites: esparza un poco de aceite vegetal tibio sobre la zona afectada y aplique sus manos como si estuviera amasando pan.
Vibración: pequeños golpeteos rítmicos con la palma de la mano mejora la circulación y relaja los músculos.
Golpes: para terminar la sesión, golpee con la palma abierta de forma muy suave, comenzando en el centro y extendiéndose hacia fuera.
Efectos
Los masajes estimulan la circulación de la sangre, y de esta forma relajan los músculos y nos libran de dolores musculares. También se sabe que los masajes pueden ayudar a curar heridas ya que mejoran la oxigenación las zonas dañadas.

Resultados
Muchas personas tratadas por la medicina convencional ven que sus enfermedades no se solucionan. A veces las terapias físicas y manuales tampoco tienen resultados positivos según sus dolencias y es aquí donde se llega a pensar que debe haber algo más que permita recobrar la salud. Todo el mundo habla de que se les agota la energía, que no tiene energía para nada más, que han de tomar bebidas energéticas, de los cereales energéticos para niños, que deben hacer vacaciones para cargar pilas… Pero pocos piensan que esta falta de energía o que una energía mal distribuida puede llevar a un desequilibrio de las funciones vitales y por último a la enfermedad.

Los orientales conocen la importancia de la energía en todas las funciones de la vida y llevan a cabo tratamientos encaminados a hacer fluir la energía correctamente por todo el cuerpo en armonía. Los primeros tratamientos consistían en hacer masaje en determinados puntos que más tarde se reconocerían como puntos de acupuntura. De hecho, el masaje es un acto instintivo. Cuando hay daño se frota la zona del cuerpo afectada. Cuando duele la cabeza, a veces se aprieta con fuerza mientras que otras sólo se pone la palma de la mano si se busca calor, o el dorso. Se puede frotar con fuerza o sencillamente pasar la mano suavemente.
En occidente hay buenos profesionales de la salud que se han ocupado de obtener información de las terapias energéticas y de divulgarlas. Se han desarrollado diferentes técnicas de masaje que tienen la misma finalidad: hacer que la persona sane y por lo tanto que se encuentre mejor. Una de estas técnicas es el Acupuntomasaje (APM). El alemán Willy Penzell empezó su divulgación en Europa en el año 1969 y posteriormente su colaborador Klaus Radloff lo hizo en el 1981.
El APM, una de las terapias que ayudan a restablecer la circulación energética, es una técnica basada en la Acupuntura tradicional china. De la misma forma que se tiene un sistema sanguíneo, sistema linfático y un sistema nervioso también se tiene un sistema energético. Este sistema energético consta de una extensa y compleja red de canales que reciben el nombre de meridianos por los que circula la energía. Esta energía es la encargada de que las funciones tanto psíquicas como físicas se lleven a término. El recorrido de la energía a través de los meridianos puede verse interrumpido por diferentes causas: dietéticas, emocionales, traumáticas, ambientales, químicas, también influye la alimentación., etc… que originan disfunciones y si no se tratan debidamente enfermedades. No siempre que se tenga cerca alguno de estos motivos de desestabilización aparecen trastornos. Eso es porque si la persona que está fuerte anímica y emocionalmente siempre es más difícil desestabilizarla. Estos tratamientos consiguen restablecer la situación energética haciendo que la energía fluya en armonía. Pero sólo se puede repartir la energía que posee el paciente, los terapeutas de APM no ponen ni quitan, es por eso que si una persona está débil energéticamente se debe procurar que su energía aumente ya sea mediante la alimentación, la respiración, etc. Se puede pensar que lo que se ha dicho del APM es lo que se dice de muchas otras terapias, pero el APM es una terapia no agresiva de resultados rápidos y de aplicación sencilla aunque no fácil. El tratamiento se adapta al estado energético del paciente en cada momento. Rinitis, dolores de cabeza, molestias en el sacro, lumbalgias, artritis, artrosis, HTA y un largo etcétera se pueden considerar trastornos energéticos y por lo tanto tratables con APM que actúa restableciendo el funcionamiento energético. En dolores agudos se pueden observar los efectos beneficiosos de una manera inmediata. Además es una terapia muy agradable para el que la recibe y gratificante para el que la practica.

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