Científicos japoneses descubrieron una nueva forma de mover objetos sobre un campo magnético con fuerza autónoma y sin consumir energías externas.
Levitación magnética: así funciona la tecnología que va a cambiar la manera de transportarnos.
La levitación magnética, una tecnología que desafía la gravedad y promete transformar la forma en que nos movemos, ya es una realidad tangible. Esta innovación, que utiliza el poder de los imanes para elevar y propulsar objetos, tiene el potencial de revolucionar el transporte terrestre, aéreo e incluso espacial.
A diferencia de los sistemas de movilidad tradicionales que dependen de la fricción y el desgaste, la levitación magnética elimina la necesidad de ruedas, rieles y otros componentes mecánicos.
En la actualidad hay varias ciudades que cuentan con los impresionantes trenes Maglev (Magnetic Levitation), como por ejemplo Shanghái (China) o Daegu (Corea del Sur), sin embargo, científicos de Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa, Japón, trabajan en un proyecto que mejoraría la tecnología de la levitación magnética a niveles impensados.
Levitación magnética: así funciona la tecnología que va a cambiar la manera de transportarnos.
Los trenes Maglev de las ciudades mencionadas necesitan de electricidad para mantener encendidos los superconductores magnéticos sobre los que pasa el tren. Pero en este nuevo sistema que se estudia en Japón, la única energía eléctrica que se necesita se utiliza para el arranque y la creación del campo magnético. Después de eso, el vehículo se mueve con fuerza autónoma sin consumir energías externas.
¿Cómo funciona la levitación magnética?
Existen dos principios fundamentales que sustentan la levitación magnética: la repulsión diamagnética y el electromagnetismo.
Repulsión diamagnética: todos los materiales poseen propiedades diamagnéticas, lo que significa que generan un campo magnético débil cuando se exponen a un campo magnético externo. En este tipo de levitación, un objeto con propiedades diamagnéticas se coloca sobre un imán potente, y crea una fuerza de repulsión que lo eleva.
Electromagnetismo: se basa en la interacción entre la corriente eléctrica y los campos magnéticos. En este caso, se utilizan electroimanes para generar campos magnéticos variables que controlan la posición y el movimiento del objeto levitado.
Los sistemas de levitación magnética se clasifican principalmente en dos categorías:
Sistemas de levitación electromagnética (EMS): en estos sistemas, los electroimanes a bordo del vehículo interactúan con los rieles metálicos guía situados en la infraestructura. El campo magnético generado por los electroimanes produce una fuerza de levitación y propulsión.
Sistemas de levitación magnética de suspensión electrodinámica (EDS): en este tipo de sistemas, los electroimanes a bordo del vehículo interactúan con los imanes permanentes situados en la infraestructura. La interacción entre los campos magnéticos genera una fuerza de levitación y estabilización.
Así es el nuevo sistema de levitación magnética japonés
Los científicos japoneses de OIST utilizaron grafito pulverizado para fabricar una pasta mezclada con cera. A ese material le adosaron una placa con imanes por debajo. Tras un chispazo de energía, descubrieron que la plata se mantiene levitada sin energía adicional o externa.
El logro del equipo del Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa fue, justamente, mantener ese grafito de tamaño reducido suspendido en el aire sin la necesidad de agentes externos.
El próximo paso es probar con modelos de mayor escala que hagan viables proyectos de mayor envergadura, como los de un vagón de tren, o un autobús, pero sin la necesidad de tanta energía.